Rusia expresó hoy su preocupación ante los planes de Israel de construir nuevas viviendas en territorios palestinos ocupados y bloquear las transferencias de los impuestos recaudados para la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
El pasado 30 de noviembre, el Gobierno israelí anunció la construcción de otras 3.000 casas en Jerusalén Este y Cisjordania y advirtió la víspera que no transferirá a la ANP las recaudaciones que le corresponden. Ambas medidas fueron adoptadas después de que el 29 de noviembre la Asamblea General de la ONU reconociera a Palestina como Estado observador.
“Pedimos a Israel revisar los planes anunciados de construcción de asentamientos y continuar las transferencias de fondos a los palestinos, para mantener la posibilidad de reanudar el proceso de negociación y lograr una paz justa y duradera en la región”, señaló el Ministerio de Exteriores de Rusia en un comunicado.
Según el documento, la construcción de nuevos asentamientos en los territorios palestinos ocupados por Israel desde 1967 es un hecho ilegal que Rusia condena junto con el resto de la comunidad internacional y que podría tener una repercusión negativa en los esfuerzos para reanudar el diálogo directo entre Israel y Palestina.
“En lo que respecta al bloqueo de las transferencias, este paso llevará a un déficit presupuestario aún mayor de la Autoridad Nacional Palestina y empeorará la situación socio-económica y humanitaria de los territorios palestinos que ya de por sí es difícil”, acotó la cancillería rusa.
