Al menos siete personas murieron y otras 16 resultaron heridas hoy en un atentado suicida con coche bomba perpetrado en un barrio chií de Bagdad, informó la policía local citada por la prensa internacional.
La explosión se produjo cerca de un puesto de control a la entrada del barrio de Kadhimiya que alberga una base de los servicios de inteligencia y uno de los mayores santuarios chiíes. Según la agencia Reuters, la mayoría de las víctimas del ataque son agentes de policía.
Irak vive últimamente una escalada de violencia sectaria originada por el conflicto entre las dos principales comunidades del país, la suní y la chií. Durante el régimen de Sadam Husein, fueron los suníes quienes predominaron en el Gobierno, pero tras la invasión de EEUU y la caída del dictador, los chiíes pasaron a controlar varios cargos clave, incluido el de primer ministro.
Según la ONU, los atentados relacionados con el conflicto interconfesional, costaron la vida a más de un millar de personas y causaron heridas a otras 2.400 solo el pasado mes de mayo.