El primer vicepresidente del Gobierno ucraniano, Vitali Yarema, declaró hoy que Ucrania no planea cesar drásticamente la cooperación con la industria de defensa rusa para no afectar la economía nacional.
“Mantenemos intensa cooperación con Rusia en la industria de defensa y en el sector de cohetes espaciales (…) El repentino cese de esta cooperación derivaría en el cierre de empresas y en el desempleo”, destacó Yarema en rueda de prensa.
Aunque el Gobierno decidió cortar el suministro de armas y material bélico a Rusia, dijo, se siguen enviando los productos de doble uso.
El viceprimer ministro mencionó en particular la empresa ucraniana Motor Sich cuyos equipos se instalan en helicópteros rusos, tanto militares como civiles.
Al mismo tiempo, Yarema afirmó que el Gobierno se propone reorientar la industria nacional de defensa al mercado interno, para asegurar el rearme del Ejército ucraniano, así como buscar mercados alternativos para las exportaciones.
Mientras, el vicepresidente del Gobierno ruso, Dmitri Rogozin, propuso este viernes agilizar la naturalización de numerosos técnicos ucranianos que trabajan en empresas de defensa rusas, en particular, en los astilleros de Lejano Oriente.
De visita en la ciudad de Novosibirsk, Rogozin dijo también que las amenazas de sanciones empujan a Rusia a “desarrollar y producir por cuenta propia cuanto necesitan su industria de defensa y su Ejército”.