El submarino "Novorossiysk", el cabeza de la serie Varshavianka, se integró en las fuerzas efectivas de la Flota rusa del mar Negro, informó este miércoles el servicio de prensa del Distrito Militar Sur (DMS).
"Actualmente el gran submarino ‘Novorossiysk’ está en Astillero del Almirantazgo de San Petersburgo, donde se llevan a cabo los preparativos para pasarlo a la flota del Norte. En los polígonos marítimos tendrá lugar la etapa final de homologación con tiros del sistema de alta precisión Kalibr", dice el mensaje.
Hasta 2016 se construirán, según los planes de la Armada rusa, seis naves de ese proyecto, todos destinados para la Flota del mar Negro.
La víspera, el ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú, declaró que la crisis en Ucrania y la creciente presencia militar extranjera cerca de las fronteras de Rusia obliga a Moscú a emplazar suficientes tropas en Crimea.
La primera unidad del proyecto 636.3 clase Varshavianka, Novorossiysk, fue puesta en quilla en agosto de 2010; la segunda, Rostov na Donu, empezó a construirse en noviembre de 2011; la tercera, Stari Oskol, en agosto de 2012, y la cuarta, Krasnodar, en febrero de 2014.
Los submarinos del proyecto 636.3 clase Varshavianka pertenecen a buques de tercera generación, desplazan 3.100 toneladas y pueden navegar a una velocidad de hasta 20 nudos y descender a 300 metros de profundidad.
Son capaces de detectar la presencia enemiga a distancias hasta cuatro veces superiores al alcance que tienen submarinos análogos de otros países.
Su armamento incluye 6 tubos lanzatorpedos de 533 mm, minas y sistemas de misiles Kalibr. La OTAN los ha denominado "agujero negro en el mar" por lo difícil que resulta descubrirlos.