Empresarios brasileños y rusos se reunieron el pasado miércoles en Sao Paolo para debatir las oportunidades de inversión recíprocas e impulsar la diversificación del comercio bilateral.
Serguei Vasíliev, jefe del consejo empresarial Rusia-Brasil, destacó que “esta reunión es la primera que se celebra al margen de las visitas de Estado”.
Uno de los objetivos clave es diversificar el intercambio comercial que rondaba ocho mil millones de dólares previamente a la crisis financiera global pero se redujo drásticamente en los últimos años.
“Nos distanciamos paulatinamente del tema de la carne y empezamos a pensar en otras componentes del comercio bilateral”, manifestó Vasíliev en una entrevista con RIA Novosti. Los productos cárnicos representan un 65% en las importaciones rusas desde Brasil, según las estadísticas oficiales.
También se debatirán en la reunión proyectos de inversión prometedores, entre ellos, la construcción de una planta de fertilizantes en Brasil y el suministro de maquinaria rusa para centrales hidroeléctricas brasileñas.
Vasíliev afirmó que “el banco de inversión ruso Vneshekonombank y su homólogo brasileño BNDES están dispuestos a financiar nuevas asignaturas”. “Ahora les toca a los empresarios”, agregó.
