Brasil subió en 2013 una posición en el ránking mundial del Índice de Desarrollo Humano (IDH), lo que le sitúa en el 79º lugar y dentro de la franja de países con un "elevado" nivel de desarrollo, si bien su nivel de educación, uno de los elementos medidos para la estadística, se mantiene por debajo de la media latinoamericana.
Así se desprende de los datos que constan en el Informe de Desarrollo Humano de 2013 divulgado hoy, jueves por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y en el que se observa que Brasil todavía permanece lejos de otros países de su región como Chile, Argentina, Cuba o Uruguay.
El IDH, es un índice, medido anualmente por la ONU, que tiene como base indicadores de renta, salud o educación y en el que cada país obtiene una nota que varía entre el 0 y el 1, por lo que cuanto más próximo se encuentra la valoración del 1, más elevado es su nivel de desarrollo.
En el índice de 2013, Brasil obtuvo una nota de 0,744, igualado con países como Georgia o el pequeño país caribeño de Granada y solo una milésima por debajo de Jordania y Serbia.
El primer lugar en el ránking lo ocupa Noruega, que obtuvo una nota de 0,944, seguida por Australia, con 0,933, Suiza (0,917), Suecia (0,915) y Estados Unidos (0,914).
En el contexto de América del Sur, Brasil fue superado por cuatro países, Chile, que ocupó el 41 ª lugar, Argentina que se situó en el 49º, Uruguay (50º) y Venezuela (67º).
En el conjunto de América Latina, Brasil también se vio superado por otros países como Cuba, que se situó en la 44ª posición, Barbados (59ª), Antigua e Barbuda (61ª), Trinidad y Tobago (64ª), Panamá (65ª), Costa Rica (68ª) o México (71ª).
El informe también desvela que Brasil está por debajo de la media latinoamericana en materia de educación y esperanza media de vida.
Así, la media de años de estudio en la región es de 7,9, mientras que en Brasil el dato quedó fijado en los 7,2, un número que no ha crecido desde 2010.
En referencia a la expectativa de vida, Brasil observó un ligero aumento y pasó de 73,7 años en 2012 a 73,9 en 2013, si bien continúa por debajo de la media latinoamericana que es de 74,9 años.
Según afirmó la coordinadora del Atlas de Desarrollo Humano en Brasil, Andreia Bolzon, a pesar del progreso que ha vivido el país, sigue estando marcado por una gran desigualdad, algo que puede observarse claramente en la distribución de renta.
El estudio del IDH también tiene un cálculo en el que elimina de la nota final el nivel de desigualdad del país.
Una vez aplicada esa reducción, se observa que Brasil perdería el 39,7 % de su valoración en el IDH debido a las desigualdades de renta y un 24,7% en función de las diferencias en el acceso a la escolaridad.
Una vez aplicado esa rebaja en función de las desigualdades del país, Brasil perdería 16 posiciones, lo que le dejaría en el puesto 95 del ránking mundial.
"Brasil tiene un gran avance en comparación con otros países y es uno de los más reconocidos por su trayectoria extremadamente positiva, pero aún es un país desigual aunque lo haya disminuido con políticas de transferencia de renta y para regularizar el empleo", dijo el representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Jorge Chediek durante un acto en Brasilia.
Chediek destacó que Brasil no debe solo intentar eliminar la pobreza, sino hacer que las personas no vuelvan a caer en ella porque "el pasivo histórico del país es enorme".
Asimismo, destacó la evolución de Brasil en las últimas tres décadas ha aumentado la esperanza media de vida en 11,2 años, la renta ha crecido un 56 % y los niños acuden de media 2,6 años más a la escuela.
"Desde mi primera visita a Brasil, hace 35 años, este es otro país", concluyó Chediek.
