La Policía rusa decomisó más de 175 kilogramos de heroína afgana y detuvo a cuatro personas en el marco de un operativo contra el narcotráfico internacional llevada a cabo en la ciudad de Náberezhnie Chelní, en la república de Tartaristán.
Según el director del Servicio Federal de Control de Drogas, Víctor Ivanov, se trata de la fase final de una macrooperación denominada “Cártel” para desarticular una red transnacional de narcotráfico que introducía en Rusia heroína de gran pureza procedente de Afganistán.
Las principales ramificaciones de la red están afincadas en Afganistán, países de Asia Central y del Golfo Pérsico, agregó el máximo responsable de la lucha antidrogas en Rusia.
Explicó que parte de la heroína intervenida fue localizada en el escondite de un vehículo todoterreno capturado por la Policía. Durante registros posteriores, se incautaron otros 77 paquetes de droga de un peso total de 85 kilogramos. La heroína decomisada contiene el 55% de diacetilmorfina, señaló Ivanov.
La operación “Cártel” se desarrolló a lo largo de los últimos cuatro años y culminó con la detención de al menos 125 personas, de los que 25 son presuntos cabecillas de la red, y la intervención de un total de 750 kilogramos de heroína afgana.
