Las negociaciones sobre el problema de la deuda argentina entre el Gobierno de Argentina y un tribunal estadounidense prosiguen este miércoles, el último día ante la eventual suspensión de pagos técnica, informó el sitio argentino Infobae.
Las negociaciones del martes, en las que participó el titular de Economía de Argentina, Axel Kicillof, concluyeron sin resultado. El ministro indicó solamente que las partes están trabajando “fuerte”.
Los fondos especulativos y las autoridades argentinas deben encontrar una solución aceptable este 30 de julio, en caso contrario Buenos Aires afrontará una suspensión de pagos.
El pasado 26 de julio un tribunal de Nueva York bloqueó un giro a los tenedores de bonos reestructurados alegando que Argentina debía primero negociar con aquellos acreedores que no aceptaron la reestructuración de la deuda soberana y llegar a un acuerdo con el resto para prorrogar los plazos del pago.
La presidenta de Argentina, Cristina Kirchner, desmintió en varias ocasiones que su país pudiera encontrarse en suspensión de pagos ya que transfiere el dinero en los plazos previstos y no es responsable de que el juez estadounidense Thomas Griesa lo bloquee.
La crisis de la deuda se agravó después de que la Corte Suprema de EEUU dispusiera que Argentina debía pagar 1.330 millones de dólares a los tenedores de obligaciones, un 7%, que no aceptaron las condiciones de la reestructuración propuesta por las autoridades argentinas.
Los acreedores descontentos comenzaron un litigio exigiendo el pago del importe total.
Mientras, al reestructurar la deuda Argentina se comprometió a no proponer hasta 2015 a los acreedores que no aceptaron la reestructuración condiciones más favorables en comparación con los demás.
Como salida de esta situación, Kicillof presentó la propuesta que consiste en la creación de una garantía de 250 millones de dólares por los bancos argentinos que permitiría prolongar las negociaciones hasta finales de año cuando expire el compromiso de no ofrecer condiciones más favorables. A cambio los fondos acreedores deberían solicitar que el tribunal permita a Argentina ejercer pagos para saldar la deuda reestructurada sin poner bajo embargo los activos del país.
Argentina ya presentó una solicitud similar pero el tribunal la rechazó. Sin embargo, los expertos estiman que de ser remitida por los demandantes podría aprobarse.
