Las reservas de alimentos importados en Moscú bastarán para de 30 a 45 días, comunicó a Nóvosti el jefe del Departamento de Comercio y Servicios de la capital, Alexéi Nemeriuk.
“Está claro que muchos proveedores y cadenas de distribución tienen almacenado lo que queda de estas existencias. Según nuestras estimaciones y a juzgar por el análisis que realizamos con las cadenas, alcanzarán para 30 o 45 días”, dijo Nemeriuk.
Declaró que las autoridades de Moscú no realizarán inspecciones en supermercados secundarios a fin de detectar productos prohibidos a la importación a Rusia antes de vender las existencias almacenadas.
Una vez transcurrido el plazo, las fuerzas del orden y otras entidades inspeccionarán los comercios para detectar suministros ilegales.
Nemeriuk afirmó que ya le informaron de importaciones ilegales, también a través de los países de la Unión Aduanera y la CEI.
“Analizamos las reclamaciones y enviamos a agentes del Servicio Federal de Aduanas para aclarar si son importaciones legales. En caso contrario, los culpables responderán administrativa o penalmente”, destacó.
Agregó que las autoridades municipales se proponen controlar todos los canales de importaciones prohibidas.
Rusia embargó por un año las importaciones agrícolas y de alimentos de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega, en respuesta a las sanciones que le impusieron a raíz de la crisis en Ucrania. Las restricciones se extienden ante todo a la carne de res, porcina y de aves de corral, frutas, hortalizas y lácteos.
