Es poco probable que Pekín, Seúl y Singapur respalden las sanciones contra Rusia bajo la presión de EEUU, aseguran los expertos consultados hoy por Nóvosti.
Anteriormente, el representante del Departamento de Estado de EEUU, Daniel Fried, declaró que la Casa Blanca está negociando con los países mencionados medidas restrictivas contra Moscú.
"China nunca actúa bajo la presión de otros países, especialmente de EEUU", afirma el presidente del Consejo ruso de Política Exterior y Defensa, Fiodor Lukiánov.
Según sus palabras, Washington no podrá ofrecer nada significativo a Pekín para que revise su postura leal y positiva respecto a Moscú.
Por su parte, el jefe del Centro de Investigaciones del Oriente, Andréi Volodin, destaca el complicado sistema de interdependencia entre EEUU y China y cree que Washington no tiene perspectivas en este ámbito, aplicando la política que busca cercar al país asiático con los "estados inamistosos".
Corea del Sur, siendo un aliado de EEUU, tendría una postura más flexible, apoyándolo solo de palabra pero en realidad evitaría toda acción que pudiera perjudicar las relaciones con Rusia, dice Lukiánov.
Seúl está orientado al mercado exterior y no piensa perder el ruso donde tiene buenas oportunidades de aumentar su presencia, por eso rechazó las sanciones contra Moscú, según Volodin.
Respecto a Singapur, el experto opina que es un estado independiente en su política económica exterior y no va a reducir su giro comercial con Rusia porque en el contexto de la ralentización del crecimiento de la economía mundial, eso provocaría la contracción de empleos, lo que pasa por el momento en Alemania, Italia y Francia.
Las sanciones del Occidente abren nuevos mercados para China, Corea del Sur y Singapur, por eso no apoyarían las medidas restrictivas contra Rusia. Además, Obama sufrió una serie de fracasos importantes en el escenario internacional que socavaron la capacidad de EEUU de influir en otros países, resume Andréi Volodin.
