El Gobierno ruso no consideró posible embargo sobre las importaciones de vinos procedentes de la UE, comunicó el viernes la viceprimera ministra Olga Golodets.
"Semejante cuestión ni siquiera se planteó", afirmó Golodets.
Anteriormente varios expertos no descartaban que Rusia pudiera restringir importaciones de coches de Europa y EEUU así como de tabaco y vinos en respuesta a las sanciones de Occidente impuestas a raíz de la crisis en Ucrania.
El vicepresidente de la Comisión para Industria del Parlamento ruso, Vladímir Gutenev, a su vez considera que si Rusia introduce limitaciones sobre las importaciones de vinos de Alemania, Francia e Italia a Rusia esto ayudaría a promocionar la producción vinícola de Crimea.
La UE y EEUU han aprobado ya una serie de sanciones tanto contra compañías y ciudadanos rusos concretos, como contra sectores enteros de la economía del país.
En respuesta, Rusia embargó por un año las importaciones agrícolas de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.
Las medidas restrictivas impuestas por Rusia son un paso necesario pero el país no debe quedar aislado, cree Evgueni Primakov, expresidente del Gobierno y exministro de Exteriores.
"La sustitución de las importaciones, por supuesto, debe contribuir al desarrollo económico de Rusia y al crecimiento del Producto Interno Bruto, que es muy necesario ahora pero de ninguna manera significa un movimiento hacia el aislacionismo", dijo.
