El presidente de la corporación aeronáutica rusa OAK, Mijaíl Pogosián, teme que las sanciones impuestas contra Rusia puedan afectar el financiamiento del proyecto de aviones regionales Sukhoi SuperJet.
Todos los proveedores y socios de la OAK, sometida a sanciones, siguen cumpliendo sus compromisos, pero el precio del dinero crece y se complican los mecanismos para captar financiación, comentó Pogosián en rueda de prensa.
La UE restringió el acceso de varias compañías y entidades financieras rusas –entre ellas la OAK y el banco Vnesheconombank– a los mercados europeos de capitales.
Pogosián recordó que para vender los aviones SuperJet (principal proyecto ruso-europeo) fue diseñado un sistema en el que participan agencias europeas de crédito a la exportación –la italiana SACE y la francesa Coface– y el Vnesheconombank.
"Queremos trabajar de forma estable pero no puedo decir que no nos amenaza nada. No sé qué pasará mañana", dijo el jefe de la OAK.
El año pasado el Vnesheconombank financió por primera vez los suministros de aviones SuperJet a México. Los créditos fueron avalados por SACE, Coface y la Agencia Rusa de Seguros de Exportaciones (Exiar).
"Por ahora seguimos trabajando y suministramos aviones a México, pero todo eso (las sanciones) no contribuye al desarrollo positivo de la situación", indicó Pogosián.
El avión para rutas regionales Sukhoi SuperJet es el principal proyecto ruso-europeo de la OAK, que a través del grupo Sukhoi participa en la compañía SuperJet International (empresa mixta con la italiana Alenia Aermacchi), responsable del estudio de mercado y ventas en Europa, América, Oceanía y África.