El presidente de Serbia, Tomislav Nicolic, alertó que los serbios en Kosovo están al borde de un genocidio y pronosticó posible división de la región por motivo étnico.
Nicolic, elegido presidente de serbia el pasado mayo, hizo estás declaraciones en una entrevista al periódico británico Guardian.
“Existe la amenaza de que Pristina será capaz de ir muy lejos. Estoy convencido de que no les importaría nada hacerlo (establecer su poder en el norte de Kosovo) ahora mismo”, dijo el mandatario serbio.
Según Nicolic “si 40.000 personas son expulsadas” y se cambia la composición étnica del territorio, eso podría llamarse un genocidio.
En este sentido, el líder serbio señaló que solo las fuerzas internacionales lideradas por la OTAN pueden frenar los intentos de las autoridades albanesas de imponer su poder en el norte de Kosovo, poblado, principalmente, por serbios.
Mientras, el comentar la posible división de Kosovo en un futuro indeterminado, Nicolic no descartó este escenario.
“La vida trae sorpresas”, recordó al tiempo de añadir que años también parecía improbable la desintegración de Yugoslavia y la reunificación de Alemania.
El 17 de febrero de 2008 las autoridades albanesas de Kosovo, apoyadas por EEUU y algunos países europeos, proclamaron su independencia de Serbia. Los serbios de Kosovo hasta la fecha se niegan a reconocer la autoridad de Pristina.
