El alto mando de las Fuerzas Armadas del Líbano manifestó en un comunicado divulgado hoy que el Ejército está dispuesto a resguardar la paz y la tranquilidad en el país.
“Tomamos la decisión de abortar cualesquiera intentos de socavar la seguridad y estamos listos para conservar la tranquilidad en el país”, indica el documento, citado este lunes por agencias.
Según la agencia AP, el Ejército libanés puso en marcha una operación amplia con objeto de desmantelar los retenes que las milicias antigubernamentales instalaron en las carreteras principales del país y poner el orden en las calles de las ciudades.
Los enfrentamientos armados entre los partidarios del Gobierno actual y sus detractores, ocurridos hoy en el Líbano dejaron un saldo de al menos dos muertos y más de diez heridos. Las partes en conflicto usaron fusiles automáticos y lanzagranadas.
El pasado viernes, en un atentado terrorista perpetrado en Beirut, murió el jefe de la Inteligencia de las fuerzas de seguridad, el general Wissam al Hassan, considerado como partidario del exprimer ministro Saad Hariri.
El diario israelí Yedioth Ahronoth afirmó hoy, citando la prensa libanesa, que en su asesinato está implicado Israel. Según el periódico, el general y su servicio contribuyeron a frustrar la actividad de 25 grupos de espionaje israelíes que operaban en el territorio libanés y detener a 17 agentes de los servicios secretos de Israel.
Por su parte, observadores libaneses vincularon el atentado con los acontecimientos en la vecina Siria, donde no cesa el conflicto armado que causó más de 30.000 muertos desde marzo de 2011, según estimaciones de la ONU.
La semana pasada, el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Lakhdar Brahimi, advirtió que la crisis podría extenderse a toda la región.
