El presidente de Francia, François Hollande, declaró anoche que su país revisará la decisión de no suministrar armas a los rebeldes sirios una vez que la nueva Coalición Nacional para las Fuerzas de la Revolución y la Oposición Siria (CNFROS) forme un gabinete de transición.
Francia se convirtió la víspera en el primer país de la Unión Europea en reconocer como el “único representante legítimo del pueblo sirio” a la CNFROS, creada el pasado domingo por el Consejo Nacional Sirio (CNS) y otros grupos opositores, la mayoría en el exilio, durante su reunión en la capital de Qatar, Doha.
“En cuanto a los envíos de armas, Francia se oponía a ellos mientras no estaba claro si las armas llegarían allí donde son necesarias y deseadas. Una vez que la coalición forme un Gobierno legítimo, el tema volverá a plantearse a todos los países que reconozcan ese Gobierno”, apuntó Hollande.
Subrayó asimismo que París está dispuesto a colaborar para garantizar la seguridad de la población civil en las llamadas “zonas liberadas” que están bajo control de la oposición. Al mismo tiempo, el mandatario galo rechazó una intervención extranjera en Siria sin el visto bueno de las Naciones Unidas.
“Una intervención podría tener lugar únicamente por resolución del Consejo de Seguridad, que hoy no está dispuesto a ello, entre otras razones porque Rusia se opone. Por eso actuaremos en defensa de la población civil”, señaló.
El mismo martes, uno de los principales aliados de Francia, EEUU, anunció que mantendrá su apoyo a la oposición siria y que la ayuda financiera a la nueva alianza centrará la conferencia de donantes que se celebrará en Londres el próximo viernes.
“Tenemos la intención de continuar apoyando a la coalición en sus esfuerzos para poner fin a la sangrienta violencia del régimen de Bashar Asad, así como para lograr un futuro democrático en Siria. En los próximos días intensificaremos la cooperación para comprobar que nuestra ayuda humanitaria y no militar sirve al interés del pueblo sirio”, afirmó el portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner.
Entretanto, Damasco calificó este miércoles de “inmoral” el reconocimiento de la coalición opositora por parte de Francia, por considerar que con esta medida París mostró su apoyó a “los terroristas y asesinos de sirios y a la desintegración del país”.
Al referirse a la propia creación de la CNFROS, el vicecanciller sirio Faisal Miqdad afirmó que se trata de la declaración de guerra al Gobierno sirio, puesto que los grupos que conforman la alianza rechazan cualquier contacto con el régimen.
Según recordó, Washington ha asignado hasta la fecha 160 millones de dólares en ayudas a la oposición siria. Los fondos fueron trasferidos a sus destinatarios a través de varias ONGs internacionales.
Desde marzo de 2011, Siria es escenario de un violento conflicto armado que, según datos de la ONU, se ha cobrado ya más de 30.000 vidas. El Gobierno del país afirma que sus fuerzas de seguridad se enfrentan a milicias fuertemente armadas y apoyadas desde el exterior.
