Un tribunal de Libia presentó hoy cargos contra treinta funcionarios de alto rango durante el gobierno del derrocado líder libio Muamar Gadafi en 2011, informaron fuentes del tribunal.
Entre los funcionarios imputados se encuentra el hijo de Gadafi, Saif al Islam, acusado de la muerte de manifestantes durante las revueltas ocurridas en el país árabe en 2011.
Entre los funcionarios, la fiscalía presentó cargos contra el exjefe de los servicios de inteligencia libios, Abdala al Sanusi, el exjefe de los servicios secretos en el extranjero, Abu Zid Omar Durdo, y el último primer ministro de Gadafi, Al Bagdadi al Mahmudi.
Además de cargos de responsabilidad por la muerte de civiles, los funcionarios fueron acusados de saqueo, sabotaje, actos contra la unión nacional, tráfico de droga, complicidad en la incitación a la violación, secuestro y dilapidación de bienes públicos.
La Corte Penal Internacional, también acusa al hijo de Gadafi de crímenes de lesa humanidad, y el pasado mes de mayo declaró que Libia no puede ejecutar un juicio imparcial por lo que exigió su extradición a La Haya. Los abogados de Seif al Islam afirmaron que en caso de que se procesara en Libia, sería condenado a muerte.
En tiempos de Gadafi, muchos consideraron a Seif al Islam como probable sucesor de su padre. Grupos armados que apoyaban al Consejo Nacional de Transición le capturaron en noviembre de 2011 cuando intentaba cruzar la frontera con Níger.
