El ministro de Asuntos Exteriores de Noruega, Boerge Brende, declaró que su país no tiene planes para destruir armamento químico de Siria en su territorio, como anteriormente propuso la ONU.
Según Brende, la destrucción de armamento químico sirio en Noruega es imposible porque implica la violación de normativas sobre armas químicas establecidas por la ONU y la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ).
El ministro sugirió que para la destrucción de este armamento se podría utilizar el territorio de EEUU.
Antes, expertos de la ONU pidieron a Noruega asumir la destrucción de al menos 500 toneladas de substancias tóxicas, la mitad de todas las reservas que se estima tiene Siria.
Según la resolución adoptada por el Consejo de Seguridad de la ONU a finales de septiembre, los países miembros de la ONU cuentan con atribuciones para recibir, controlar, transportar y destruir el armamento químico de Siria.
En la actualidad, en Siria se encuentra un grupo conjunto de la OPAQ y la ONU encargado de la destrucción del arsenal químico sirio en el plazo de un año.
