La Fiscalía General de Ucrania recurrió las decisiones del Parlamento de Crimea de disolver el Gobierno local, nombrar a Serguéi Aksiónov como jefe del Ejecutivo de la Autonomía y fijar un referéndum que deberá definir el estatus de la península.
Además, la Fiscalía calificó de ilegal la subordinación de las fuerzas del orden a las autoridades locales y la formación de otras, denominadas “unidades de autodefensa de Crimea”.
“Debemos subrayar que la legislación no ha sido enmendada para restringir o vulnerar los derechos de los ciudadanos según su pertenencia étnica, lingüística o confesional. Por lo tanto, las acciones separatistas no tienen ningún fundamento real”, dice el comunicado de la institución.
La Fiscalía recordó a los militares ucranianos que “someterse a las exigencias de deponer las armas y abandonar los equipos técnicos o sus cuarteles se calificará de alta traición y acarreará las respectivas consecuencias” en respuesta a la autorización del Senado ruso a emplear la fuerza para proteger a las población rusa.