“Tonto, tonto, tonto”. Este es el calificativo que le mereció al senador demócrata Patrick Leahy la financiación estadounidense de la red social cubana ZunZuneo en un intento de provocar una ‘primavera cubana’.
Leahy no es un simple senador, preside el subcomité de Asignaciones del Senado, bajo cuya autoridad está la Agencia de Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID) que durante dos años, de 2010 a 2012, desarrolló ese proyecto, que, según la Casa Blanca, no tiene nada de “secreto” y tampoco fue un programa de inteligencia.
La USAID “hace un montón de cosas buenas alrededor del mundo… ésta no es una de ellas”, indicó el senador en declaraciones a la cadena de televisión MSNBC, recogidas por la Voz de América.
Según reveló ayer la agencia The Associated Press, el objetivo del proyecto era movilizar la opinión pública cubana en contra del régimen comunista.
La Administración de EEUU, según los periodistas, ocultó a los usuarios que la red social se había creado con dinero de los contribuyentes norteamericanos.
La AP tuvo acceso a documentos de la USAID de los que se desprende que el plan consistía en captar a usuarios con información sobre los deportes, la música y otros temas ajenos a la política, para después ir introduciendo en los foros temas políticos y poder promover movilizaciones en contra de las autoridades cubanas.
Uno de los documentos de la USAID citado por AP habla sobre la necesidad de “revisar el reparto de la fuerza” entre el Gobierno y la sociedad de la isla.
Tras la publicación del informe, representantes de la Administración norteamericana reconocieron que EEUU había financiado la creación del ‘Twitter cubano’, aunque negaron que la red social se usaba para debilitar al régimen de La Habana.
El portavoz de la USAID, Matt Herrick, afirmó en un comunicado que el proyecto tenía por objetivo “crear una plataforma para que los cubanos pudieran comunicarse libremente”.
“Los cubanos tuvieron la posibilidad de comunicarse, y estamos orgullos de ello”, aseguró.
Por su parte, la portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, dijo que las discusiones sobre temas políticos no eran impulsadas por los operadores del proyecto, sino por sus usuarios.
“Los contenidos políticos no provenían de los que trabajaron en el proyecto, sino de los propios cubanos”, aseveró Harf, al resaltar no obstante que para Washington “fue muy importante apoyar al pueblo cubano y facilitarle una plataforma para intercambiar informaciones políticas”.
La red social estuvo activa dos años, hasta 2012, y contó con unos 40.000 usuarios. Según Harf, la creación del ZunZuneo costó a las arcas del Estado norteamericano 1,2 millones de dólares.
