El Gobierno en Kiev no piensa suspender la operación especial en las regiones del este de Ucrania y regulará su marcha en función del cumplimiento de los acuerdos logrados el jueves en Ginebra, declaró hoy el canciller interino de Ucrania, Andréi Deschitsa.
“La operación continúa y su intensidad dependerá de la puesta en práctica de los acuerdos, el desalojo de los edificios ocupados y la entrega de armas”, dijo Deschitsa en una rueda de prensa.
Las autoridades de Ucrania, según el ministro, confían en que las milicias respetarán los acuerdos existentes y aprovecharán la oportunidad que “les da el Gobierno”.
La víspera, Rusia, Ucrania, EEUU y la UE acordaron en Ginebra una serie de pasos para reducir la tensión en Ucrania, en particular, el desarme de las milicias, el desalojo de los edificios ocupados y la amnistía para protagonistas de las protestas en Ucrania, a menos que hayan cometido delitos de gravedad.
También urgieron a impulsar un diálogo inclusivo en el marco de la reforma constitucional que debe garantizar los derechos de todas las regiones, grupos étnicos y minorías lingüísticas.
En Donetsk, Lugansk, Járkov y otras ciudades del este de Ucrania, de población mayoritariamente rusa, se suceden desde marzo protestas a favor de la federalización. El Gobierno interino en Kiev lanzó una operación especial para retomar el control en estas localidades.