El ex colaborador de la Agencia estadounidense de Seguridad Nacional (NSA), Edward Snowden, que recibió en agosto pasado asilo temporal en Rusia, declaró que pedirá una prorroga, aunque le gustaría volver a EEUU.
El asilo de Snowden expira el próximo 1 de agosto.
“Cuando se esté acercando el plazo de expiración, sin duda pediré que lo prorroguen”, indicó.
Añadió a la vez que le gustaría volver a EEUU.
“Si pudiera elegir adonde ir entre todo el mundo, optaría por mi casa (…) No creo que en algún momento haya habido dudas de que quiero volver a casa”, dijo en una entrevista a la cadena televisiva NBC.
También señaló que recibió una formación tradicional de espía.
Según Snowden, los servicios secretos de EEUU no se percatan de las dimensiones que tiene la fuga de datos clasificados.
“No tienen ni idea de los documentos que han sido extraidos. El control es tan débil y negligente que cualquier contratista privado, por no hablar de los funcionarios, podía entrar en la sede de la NSA, tomar cualquier cosa y salir y nadie nunca se daría cuenta”, afirmó, al añadir que es necesario hacer responder a los culpables de esta situación.
Hace un año Snowden divulgó información sobre programas de vigilancia masiva que realizan los servicios secretos estadounidenses y huyó de EEUU.
Después Washington indicó que Snowden trabajó como informático en empresas que colaboraban con la CIA y la NSA. Sin embargo, el propio fugitivo declara que fue especialista técnico y trabajó en los servicios secretos en los más altos niveles.
Snowden también aseguró que no está relacionado con las autoridades rusas.
“No tengo ningún vínculo con el Gobierno ruso. Nunca me he reunido con el presidente de Rusia. El Gobierno ruso no me apoya. No cobro dinero de ellos”, dijo.
Anteriormente, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, aseguró que los servicios secretos rusos nunca trabajaron con Snowden.
