La OTAN debe estar preparada para garantizar la seguridad colectiva en caso de tensiones en la región del Ártico, declaró hoy el secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen.
Señaló que Rusia se enfocará más hacia el Ártico, por lo que "los miembros de la OTAN tendrán que afrontar el asunto".
Al intervenir en una reunión de la Asamblea Parlamentaria de la Alianza en Vilna, Rasmussen aclaró que no aboga por la militarización del Ártico, pero "el hecho de que se abrirán nuevas rutas marítimas (...) aumenta el riesgo de mayor tensión en la región”.
Recientemente, Rusia comenzó a desarrollar enérgicamente sus territorios del norte, incluyendo la extracción de hidrocarburos, así como la Ruta marítima del Norte que se está convirtiendo en una alternativa a las rutas tradicionales de Europa a Asia. Para proteger sus intereses en esta región Rusia tomó una serie de medidas, incluso militares.