Los líderes del G7 que coincidirán con Vladímir Putin en la celebración del 70º aniversario del desembarco aliado en Normandía le pedirán que coopere con el futuro presidente ucraniano Piotr Poroshenho y contribuya a estabilizar la situación en Ucrania, declaró la canciller alemana, Angela Merkel.
“Hemos dado a entender claramente que en las negociaciones con el futuro presidente de Ucrania y en los encuentros con Putin, que se van a celebrar al margen de las celebraciones en Normandía, transmitiremos un mensaje común. Es importante que Rusia contribuya a estabilizar y distender la situación, lo que implica ante todo la cooperación con el nuevo presidente ucraniano”, dijo Merkel tras una cena de trabajo en la que los líderes del G7 hablaron de la crisis en Ucrania.
Merkel sugirió también que Rusia “contribuya a cesar el flujo de separatistas y armas a través de la frontera ruso-ucraniana”.
Por su parte, el presidente galo François Hollande admitió que, al invitar a Poroshenko a Normandía, era consciente de que podría “provocar su encuentro con Vladímir Putin”. “Ya veremos si van a contactar”, agregó.
El presidente Putin afirmó la víspera en una entrevista con las cadenas francesas TF1 y Europe 1 que Moscú trabajará con el nuevo Gobierno de Ucrania porque respeta la voluntad expresada por los ucranianos en las urnas. A la pregunta de si conversará con Poroshenko durante la estancia en Francia, aseguró que no evitará a nadie.
