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El presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, decidió prolongar por 72 horas el alto el fuego en Ucrania Oriental, comunicó una fuente diplomática europea citada por AFP.
“El presidente Poroshenko propuso prolongar por 72 horas el alto el fuego", indicó la fuente.
El plazo de la tregua pactada entre Kiev y las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk finalizaba a las 22:00 hora local (19:00 GMT) de este viernes.
En una entrevista concedida el jueves a la CNN, el líder ucraniano afirmó estar “dispuesto a pactar la paz con quien sea”.
“Quiero traer la paz a mi país, no porque seamos débiles o menos patriotas. Estamos dispuestos a defender nuestro país, porque detesto la sola idea de no aprovechar una última oportunidad de recuperar la paz en la región”, enfatizó.
El pasado 20 de junio, el presidente de Ucrania ordenó que las fuerzas de seguridad que intervienen en la operación especial en el Este cesaran el fuego por una semana, y presentó un plan de paz para resolver el conflicto. Posteriormente, los independentistas de Donetsk y Lugansk anunciaron que aceptaban el armisticio.
Situación en el este de Ucrania >>
El líder ruso, Vladímir Putin, llamó este viernes a una tregua prolongada en Ucrania, como condición indispensable para “negociaciones sustanciales” entre las autoridades de Kiev y las milicias independentistas.
En los siete días de la tregua, no se consiguió cesar el fuego completamente. Seguían produciéndose tiroteos, ataques a puntos de control que provocaron víctimas de ambas partes.
Los milicianos de las repúblicas populares acusaron al Ejército ucraniano de bombardeos con el uso de artillería.
La fuerza del orden declaró a su vez que en los ataques en las provincias rebeldes en un solo día murieron dos y fueron heridos al menos 10 militares.
Además, un helicóptero Mi-8, que regresaba de una misión de transporte, fue derribado por los milicianos con la ayuda de un sistema antiaéreo portátil mientras. A consecuencia del ataque murieron 9 personas.
Los enfrentamientos continúan también el último día del armisticio.
Los milicianos aniquilaron la víspera cuatro blindados y un vehículo de combate de las fuerzas de seguridad que ayer renovaron sus ataques a las ciudades de Slaviansk y Kramatorsk tratando de romper la defensa.
"La defensa no está rota. Al revés, hemos pasado a la ofensiva", declaró hoy el primer ministro de la RPD, Alexandr Borodái.
Agregó que la ciudad sufre una crítica situación humanitaria ya que se complica el suministro de alimentos. Se planea introducir cartillas de racionamiento. Surgió también el problema de agua ya que dejaron de funcionar estaciones de bombas.
Se informó anteriormente que de 110.000 residentes de Slaviansk, en la ciudad queda todavía un 40%.
En Donetsk, los milicianos se apoderaron hoy de una instalación militar que se encuentra en pleno centro de la ciudad. Se desconoce el número de víctimas.
A raíz de esos acontecimientos y a pesar del armisticio, Poroshenko ordenó al Ejército abrir fuego «sin vacilar» ante cualquier violación de la tregua por las milicias independentistas.
El presidente ucraniano declaró la víspera que desde que se decretó la tregua el pasado 20 de junio, murieron 18 militares y otros 27 resultaron heridos.
Sin embargo, durante la tregua, las partes consiguieron realizar el canje de rehenes.
