Hackers chinos accedieron el pasado marzo a servidores de empresas públicas de EEUU que almacenan datos sobre decenas de miles de empleados, informó hoy el periódico The New York Times.
Según dicha fuente, los piratas informáticos atacaron los servidores de la Oficina de Recursos Humanos estadounidense y se apoderaron de información federal clasificada.
Una vez detectada la brecha, el acceso fue cerrado, pero queda la duda sobre qué tipo de información y cuánta fue sustraída.
Según el diario, los ataques provenían desde China, pero no se sabe si los atacantes actuaban por orden de Pekín.
La empresa privada norteamericana, especializada en seguridad en la red, Crowdstrike, denunció que a partir de 2007 la unidad Nº61486 del Ejército de China, emplazada en Shangái, llevó a cabo permanentes ataques contra instituciones y empresas del sector militar estadounidense.
En mayo de 2014 el Ministerio de Justicia de EEUU acusó a cinco militares chinos de "haber robado" secretos comerciales de empresas militares norteamericanas.
En reiteradas ocasiones EEUU señalaron a China y Rusia como "principales ciber-amenazas".
Ya en noviembre de 2011 la Dirección Nacional de Contraespionaje informó al Congreso de que los hackers de estos dos países demuestran el mayor empeño por entrar en los servidores que guardan información económica y militar.
Por su parte, Pekín no dejó de negar su implicación a cualquier tipo de acciones en el ciberespacio y respondió con denuncias de actividad estadounidense en las redes chinas.
