El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, no ha desvelado si el Ejército israelí va a proceder a una invasión terrestre de la Franja de Gaza en un futuro próximo.
En una rueda de prensa celebrada en la sede del ministerio de Defensa en Tel Aviv, Netanyahu ha señalado que “ninguna presión internacional evitará que Israel continúe su operación en Gaza”.
Instantes antes de que se iniciara la rueda de prensa, las sirenas han sonado con fuerza en Tel Aviv debido a una salva de cohetes lanzada por las milicias de la Yihad Islámica desde Gaza.
Y una vez acabada la rueda de prensa han vuelto a oírse las sirenas en Tel Aviv y en otras localidades de esa región, la más poblada del país.
Netanyahu ha dicho que desde el inicio de la operación Margen Defensivo, el Ejército ha bombardeado “más de mil objetivos de Hamás y la Yihad Islámica” y ha criticado a los responsables de Hamás por “esconderse detrás de los ciudadanos de Gaza”, por lo que “son responsables de todas las bajas” registradas en la Franja.
Los bombardeos de Israel sobre Gaza han continuado por cuarto día consecutivo y hasta ahora han causado la muerte de 14 personas, incluidos cinco miembros de una familia en la localidad de Jan Yunis, entre quienes había una niña de 7 años.
Desde el lunes por la noche han muerto 104 palestinos y más de 700 han resultado heridos. La mayoría de las víctimas son civiles de todas las edades, tanto hombres como mujeres.
Medios diplomáticos comentan que una invasión terrestre de Gaza tendría que conducir a una victoria decisiva de Israel, lo que no parece del todo seguro que ocurra.
Las tropas concentradas a las puertas de Gaza apenas podrían ocupar durante un tiempo limitado una parte de la Franja, y de esta manera es difícil que consiguieran acabar completamente con las milicias que operan en la región.
