En el hospital Kamal Adwan de la localidad de Beit Lahia, en el norte de Gaza, solo se oían esta tarde gritos de dolor y llantos.
Decenas de personas se aglomeraban en la entrada y en la puerta de la morgue. Algunos llegaban exhaustos desde Beit Janún, una población cercana a la frontera con Israel. Otros llegaban de Gaza ciudad o de otros puntos cercanos para ver si alguno de sus familiares se encontraba entre los 17 muertes y más de 200 heridos que ha provocado un bombardeo del Ejército israelí en una escuela de la Agencia de la ONU para los Refugiados (UNRWA) que acogía a 1.500 personas que habían huido de sus hogares por miedo a las bombas.
“Ha venido la Cruz Roja esta tarde y nos ha dicho que nos concentráramos en el patio, que nos iban a evacuar porque la zona se estaba poniendo peligrosa”, ha explicado a RIA Nóvosti una mujer vestida de negro que no paraba de llorar. “Cuando se han ido, nos han bombardeado. Había niños, mujeres, estábamos allí para huir de las bombas y han venido a matarnos, en un centro de la ONU”, ha dicho.
Su prima, sentada a su lado en unos asientos que preceden a la puerta de la morgue, grita y agita los brazos. “Me han robado a mi único hijo, tenía 21 años... Tenemos que ver como los cuerpos de nuestros hijos quedan cortados a trozos y nadie hace nada... ¿De dónde eres, europea? ¿Te parece que esto es aceptable? El resto del mundo mira como nos matan y nadie hace nada. Ni siquiera los árabes, les tendría que dar vergüenza”, ha exclamado. Se llama Leila y tiene cuatro hijas más y dos nietos que están heridos. Asegura que nadie avisó de que iban a bombardear la escuela.
Un portavoz de la UNRWA en Gaza, Adnan Abu Hasana, ha corroborado esta información. La UNRWA no recibió “ningún aviso” del Ejército israelí.
“Le pedimos al Ejército muchas veces que nos avisara porque sabemos que la escuela está situada en un lugar peligroso. Les dijimos que nos dieran tiempo suficiente para evacuar, pero no lo han hecho”, ha denunciado Abu Hasana.
El portavoz de la UNRWA Chris Gunnes ha asegurado en su cuenta de Twitter que “se dieron al Ejército israelí formalmente las coordenadas precisas del refugio de la UNRWA en Beit Janún. Durante la jornada, la UNRWA ha intentado coordinar con el Ejército israelí una tregua para que los civiles pudieran salir y no la han concedido”.
El Ejército israelí ha dicho que esta tarde, el grupo islamista Hamás ha disparado varios proyectiles desde Gaza que han caído en el área de Beit Janún, insinuando que el ataque a la escuela podía haber sido obra de Hamás. Pero según varios testigos, diversos proyectiles de artillería de tanques israelíes situados a un kilómetro han impactado en la escuela.
