La jefa del Comité de la Cruz Roja de Rusia, Raisa Lukutsova, declaró hoy que voluntarios de esta ONG están dispuestos a implicarse en una operación humanitaria en el este de Ucrania.
"Estamos dispuestos a participar, dijo Lukutsova.
Agregó que "se han redactado con urgencia telegramas a la Cruz Roja de Ucrania y a la oficina europea de la Federación de la Cruz Roja y la Media Luna Roja en Budapest, además de declaraciones al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja".
Por ahora, ningún voluntario ha partido a Ucrania. "No podemos viajar sin permiso de los ucranianos", explicó Lukutsova al señalar que "intencionadamente ponen toda clase de obstáculos para que el Comité de la Cruz Roja de Rusia y el CICR no participen en la operación".
Lukutsova calificó de "absolutamente correcta" la postura del Ministerio ruso de Exteriores que anunció con anterioridad la decisión de introducir la caravana de camiones rusa en el territorio de Ucrania ante las continuas dilaciones a la hora de consensuar con Kiev el envío de la ayuda humanitaria.
Anteriormente el CICR confirmó que la región de Lugansk, para la que se destina la ayuda rusa, sufre una verdadera penuria, pues sus habitantes se ven privados de agua potable, alimentos y electricidad, carecen de los medios más elementales de supervivencia.
Rusia pidió a inicios de agosto al Consejo de Seguridad de la ONU enviar una misión internacional con la ayuda rusa al este de Ucrania.
El 12 de agosto, de la provincia de Moscú partió un convoy de 280 camiones blancos Kamaz que llevan, en particular, 400 toneladas de granos, 100 toneladas de azúcar, 54 toneladas de fármacos e instrumental médico, 12.000 sacos de dormir y 69 generadores eléctricos.
Este viernes los primeros camiones del convoy cruzaron la frontera con Ucrania.
