Los brasileños que hacían turismo fuera del país durante el mes de julio gastaron 2.415 millones de dólares, batiendo un nuevo récord desde que el Banco Central empezó a registrar este dato en 1995.
De acuerdo a los datos divulgados esta mañana por el Banco Central, los turistas brasileños dejaron más dinero fuera del país entre junio y julio que el millón de visitantes extranjeros que asistió al Mundial de fútbol. Estos últimos desembolsaron en Brasil un total de 1.596 millones de dólares durante el campeonato (797 millones en junio y 789 en julio de este año).
Entre enero y julio de 2014, los brasileños en el exterior consumieron por valor de 14.900 millones de dólares, un 3,5% más en comparación con los 14.403 millones de dólares correspondientes al mismo período de 2013.
El incremento del gasto de los brasileños fuera del país fue uno de los motivos por los que la mayor economía de América Latina registró un déficit de cuenta corriente de 6.018 millones de dólares en julio.
En la cuenta de rentas, que incluye remesas vinculadas al reparto de dividendos y el pago de intereses y salarios, Brasil apuntó un déficit de 3.215 millones de dólares en julio, similar al mismo mes de 2013. El acumulado de este dato para los siete primeros meses de 2014 ascendió a 22.153 millones de dólares.
Los datos divulgados por el Banco Central también indican que en los siete primeros meses de 2014 Brasil anotó un déficit de cuenta corriente de 49.330 millones de dólares, un 5,4% menos frente a los 52.150 millones registrados en el mismo periodo del año pasado. Este resultado mejora la posibilidad de que el déficit brasileño en las transacciones con el exterior permanezca por debajo de 80.000 millones de dólares en negativo, tal y como prevé el Gobierno de Dilma Rousseff.
El Banco Central también informó de que el país recibió 35.200 millones de dólares de inversión extranjera directa (IDE) entre enero y julio de 2014, un dato ligeramente inferior al registrado en el mismo periodo de 2013.
La máxima autoridad monetaria de Brasil estima una inversión extranjera directa por valor de 63.000 millones para todo 2014, lo que desecha la posibilidad de cubrir el déficit de cuenta corriente anual con el dinero para inversiones procedente del extranjero.
