Durante los diez días que han transcurrido desde que entró en vigor el cese del fuego, del 5 al 15 de septiembre, en Donbás murieron 16 personas y 98 resultaron heridas, informó hoy el embajador de Ucrania ante la OSCE, Ígor Prokopchuk.
"El Ejército ucraniano solo responde al fuego que abren los milicianos", dijo el funcionario y adujo como prueba del cumplimiento de los acuerdos de Minsk por Kiev la aprobación de las actas legislativas sobre el estatus especial de unos territorios del este de Ucrania y la amnistía a los participantes de las hostilidades.
Al mismo tiempo reconoció que no puede trazar la línea divisoria entre una violación de la tregua y el fracaso del régimen de alto el fuego.
El pasado 5 de septiembre en la capital bielorrusa, Minsk, tuvo lugar un encuentro del Grupo de Contacto que acabó con el cierre del alto el fuego entre Kiev y los independentistas. Las dos partes denuncian con regularidad la violación de la tregua, pero los observadores internacionales declaran que el cese del fuego se observa en general.
El Parlamento ucraniano aprobó el 16 de septiembre una ley sobre facultades especiales de las autoridades locales de varios distritos de Donbás.
La ley garantiza el libre uso de cualquier lengua de la población local y estimula la cooperación transfronteriza con Rusia. Para reconstruir Donbás, se introducirá un régimen económico especial. Las autoridades locales podrán cerrar con el Gobierno central convenios sobre el desarrollo económico, social y cultural.
Se proclamará la amnistía a los participantes en las hostilidades en el este de Ucrania.
Se anunció que la ley tendrá vigencia durante tres años. Pero según el asesor del presidente de Ucrania, Ígor Gryniv, podrá abrogarse dentro de medio año "si se logra imponer el orden".
