La División Estatal de Vigilancia Epidemiológica de Amapá, en el norte de Brasil, confirmó este viernes cinco nuevos casos de fiebre Chinkungunya elevando para 26 los casos del virus detectados en la región.
Esta semana por el Ministerio de Salud brasileño elaboró una serie de medidas de urgencia para contener el brote del virus que incluyeron la visita de técnicos de la Coordinadora de Vigilancia Sanitaria a los municipios de Oiapoque y Macapá, distanciados entre sí por 590 kilómetros, que concentran la mayor concentración de casos debido a su proximidad con la frontera con la Guyana Francesa, origen de la epidemia.
En ambas localidades, los técnicos realizan un plan de exterminio del mosquito "Aedes aegypti", culpable de la transmisión del virus, mediante la desecación y tratamiento químico de los criaderos de estos mosquitos, generalmente aguas estancadas próximas a las áreas pobladas.
Trasmitido por la misma especie de mosquito, el virus Chinkungunya y el Dengue poseen la misma sintomatología que incluye fiebre alta, dolores de cabeza y articulaciones, vómitos, manchas rojas en la piel e incluso incapacitación o muerte del enfermo en los casos más graves.
Sin posibilidad de vacuna o cura para la enfermedad, el tratamiento suele ser paliativo recurriendo a analgésicos para aliviar los síntomas o el uso de corticoides para reducir el dolor articular.
