El avance del proceso negociador entre el G5+1 e Irán infunde "optimismo cauto" al ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, según él mismo manifestó en una entrevista con Bloomberg TV.
"Vamos avanzando en la dirección correcta. Un 95% del acuerdo, si miramos el documento que es objeto de negociaciones, está consensuado. Pero es en el restante 5%, dos o tres puntos muy difíciles, donde se esconde el diablo", admitió Lavrov.
Agregó que son asuntos "posibles de resolver" aunque "difíciles, porque requieren de ambas partes una decisión política para lograr solución de compromiso". Rusia y China, según Lavrov, propusieron un par de "fórmulas que podrían ser de utilidad".
"Todavía nos queda un par de meses hasta la fecha indicada, el 24 de noviembre, así que mantengo optimismo cauto", dijo.
En noviembre de 2013, Irán y el Grupo 5+1 (China, EEUU, Francia, Gran Bretaña y Rusia más Alemania) lograron en Ginebra un acuerdo provisional por el que Teherán asumió el compromiso de cesar el enriquecimiento de uranio más allá del 5%, suspender la producción de plutonio y de centrifugadoras, así como autorizar el acceso de inspectores internacionales a las instalaciones nucleares iraníes a cambio del levantamiento parcial de las sanciones.
A mediados de julio, Teherán y el sexteto no consiguieron llegar a un acuerdo definitivo tras seis rondas de conversaciones y pactaron prorrogar el plazo del proceso negociador hasta el 24 de noviembre.
