Más de 500 cadáveres encontrados en la zona de la operación especial en Donbás siguen sin identificar, informó el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa, Andréi Lisenko.
Lisenko aconsejó a los familiares de los desaparecidos solicitar a unidades del Interior un certificado para realizar un análisis de ADN. Los resultados se introducirán en una base de datos especial.
"Hoy en día es necesario realizar el análisis (de ADN) a 552 cuerpos", constató Lisenko.
Previamente, la página del presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, informó citando su asesora Olga Bogomolets, que el Ministerio del Interior de Ucrania, en vez del de Sanidad, se encargará de realizar los análisis. Los departamentos locales de la policía disponen ya de grupos especiales para recoger las denuncias sobre las desapariciones o secuestros y recolectar muestras biológicas para los exámenes.
Kiev lanzó en abril pasado una operación militar en el este de Ucrania, cuya población, en respuesta al violento cambio de gobierno producido en febrero, optó por proclamar la independencia.
Según los últimos datos de la ONU, el conflicto produjo más de 3.200 muertos y al menos 8.000 heridos.
El pasado 19 de septiembre las autoridades de Kiev y los independentistas del este de Ucrania, reunidos en Minsk junto con mediadores de Rusia y la OSCE, acordaron respetar el alto el fuego pactado en el país, crear una zona desmilitarizada de 30 kilómetros, retirar el armamento pesado de esta zona y desplegar una misión de monitoreo de la OSCE.
Los militares y los independentistas denuncian con regularidad la violación de la tregua, pero las dos partes y los observadores internacionales constatan que el cese del fuego se respeta en general.
