Más de la mitad de la población de Alemania, Reino Unido y Francia cree que la Unión Europea no debería jugar un papel activo en la situación en Ucrania y que su aportación debería limitarse a una misión de paz y al envío de ayuda humanitaria, según datos de un sondeo encargado por esta agencia y realizado por la compañía ICM.
El 54% de los preguntados opina que la Unión Europea no debe inmiscuirse en la situación en Ucrania, mientras que el 46% expresó la opinión contraria.
Entre los partidarios de la injerencia son mayoría los varones de 18 a 34 años.
El 76% de los europeos apoya el envío de ayuda humanitaria a Ucrania (el 85% de los británicos, el 86% de los alemanes y el 57% de los franceses), pero solo el 26% aboga por facilitar ayuda económica a Kiev (el 41% de los alemanes, el 30% de los británicos y solo el 8% de los franceses).
Por otra parte, únicamente el 13% creen conveniente suministrar armas y otro material bélico a Ucrania.
El Gobierno de Kiev lanzó en abril pasado una operación especial contra los habitantes del este de Ucrania disconformes con el cambio de gobierno efectuado en febrero. Según datos de la ONU del 3 de octubre, a raíz del conflicto han muerto ya más de 3.600 civiles y casi 8.500 resultaron heridos.
Los milicianos de Donetsk descubrieron en septiembre varias fosas comunes donde se encuentran enterrados civiles asesinados por las fuerzas de seguridad de Ucrania, según testimonios de ciudadanos locales. El canciller ruso, Serguéi Lavrov, afirmó que en han sido encontrados más de 400 cuerpos humanos. El Comité de Investigación de Rusia abrió un expediente penal sobre el genocidio de la población de habla rusa en Donbás.
Varias decenas de activistas murieron y unos 200 resultaron heridos en la Casa de Sindicatos de Odesa incendiada por ultras en mayo pasado.
A estas víctimas se debe sumar a las 298 personas que perdieron la vida en el siniestro del Boeing malasio en el este de Ucrania en julio, así como a cuatro periodistas rusos muertos en tierra ucraniana, incluido el reportero gráfico de esta agencia, Andréi Stenin.
A favor de investigar los crímenes cometidos en Ucrania durante la crisis se pronunciaron el 76% de los británicos, el 68% de los franceses y el 54% de los alemanes.
El 89% señaló como la principal tarea en estos momentos investigar los crímenes de lesa humanidad, situaron en segundo lugar los casos de secuestro y el asesinato de periodistas, y en tercero, la investigación de las causas del siniestro del Boeing malasio.
Según el sondeo, los que siguen con mayor frecuencia la información sobre la crisis ucraniana serían los británicos, con el 92% de los encuestados, por delante de los franceses (83%) y los alemanes (78%).
Entre los mayores de 65 años de Gran Bretaña, por ejemplo, el porcentaje alcanza el 96% mientras que los encuestados de entre 25 y 34 años son los menos interesados, con un 85%. En Alemania estas cifras son del 88% y el 61%, respectivamente, mientras que en Francia son del 93% y el 67%.
La compañía ICM entrevistó por teléfono a 3.006 ciudadanos adultos de Alemania, Francia y Gran Bretaña entre el 17 y el 28 de septiembre. ICM es miembro del British Polling Council y se rige por sus normas.
