El Ministerio ucraniano de Asuntos Exteriores exhortó a Rusia a usar su influencia para impedir las elecciones en Donbás, este de Ucrania, previstas para el 2 de noviembre y consideradas ilegales por Kiev.
Si Rusia realmente impide que se celebren "las llamadas elecciones que demostrará su lealtad a los compromisos de Minsk y su disposición a contribuir la desescalada de la situación (en Ucrania)”, dijo el canciller ucraniano, Evgueni Perebiynis.
El sábado pasado entró en vigor la ley sobre el estatus especial de Donbás, aprobada el 16 de septiembre por el Parlamento de Ucrania, que otorga poderes especiales a las autoridades de algunas zonas del este de Ucrania.
La norma garantiza el libre uso de cualquier idioma y fomenta la cooperación transfronteriza de estas regiones con Rusia.
También declara una amnistía para los participantes de las hostilidades en el este de Ucrania y fija la fecha de las elecciones locales en estos territorios en el próximo 7 de diciembre. El estatus especial de Donbás estará vigente por tres años.
Los habitantes de las provincias de Donetsk y Lugansk del este de Ucrania, descontentos con el cambio del poder efectuado en Kiev en febrero pasado, convocaron mítines en abril y proclamaron las respectivas repúblicas populares que más tarde anunciaron su soberanía y formaron una unión conocida como Novorrusia.
En respuesta Kiev lanzó contra los independentistas una operación especial a raíz de la cual 3.707 personas murieron y 9.075 resultaron heridas, según datos de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) del 15 de octubre.
