El Parlamento Europeo condenó el jueves las "inaceptables desapariciones forzosas y crímenes en Iguala", ciudad del estado de Guerrero donde están desparecidos 43 estudiantes rurales de magisterio, en una resolución adoptada hoy por 495 votos a favor, 86 en contra y 56 abstenciones.
El Parlamento Europeo pidió a las autoridades mexicanas que "actúen de forma rápida, transparente e imparcial" para arrestar y llevar ante la justicia a los responsables, indica la resolución difundida en México por la declaración de la Unión Europea.
"Las investigaciones deberían continuar hasta que los estudiantes estén a salvo", indica el documento.
La resolución repudia los crímenes cometidos en el estado de Guerrero, exige su investigación, y expresa una "profunda preocupación por la aparente infiltración del crimen organizado en los organismos locales policiales y administrativos".
Esa declaración alude a la conexión del alcalde José Luis Abarca de Iguala (200 km al oeste), con el cartel Guerreros Unidos, una rama de la mafia de los hermanos Beltrán Leyva. Cinco días después de los ataques en Iguala fue detenido el último de los hermanos al frente de esa pandilla, Héctor, apodado El H.
El Parlamento Europeo respalda el compromiso del presidente Enrique Peña para investigar el caso y "poner fin a la violencia relacionada con las bandas en México".
Los legisladores europeos instan a los Estados miembros de la Unión Europea (que ya expresó su condena de esos hechos) a aumentar el apoyo a México para defender los derechos humanos a través de programas y recursos financieros y técnicos.
"Tenemos que alzar una voz de profunda condena de estos crímenes y ofrecer ayuda a las autoridades mexicanas para afrontar el reto de luchar contra el narcotráfico y la corrupción, que generan personas que utilizan las instituciones en beneficio propio", dijo la eurodiputada española conservadora Teresa Jiménez, una de las autoras de la resolución.
Los diputados recordaron que, de acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH, Ombudsman federal), "el 98 % de los delitos quedan impunes" en México, el país con más periodistas asesinados del mundo, y con 22.000 desaparecidos registrados oficialmente.
El eurodiputado del Partido Verde de Alemania, Ernst Urtasun dijo que "este crimen atroz se añade a un clima de impunidad creciente" en México, y exigió al presidente Peña "que acabe con el clima de impunidad" en su país.
La noche del 26 de septiembre y la madrugada siguiente, seis personas, tres de ellas estudiantes rurales, fueron asesinadas por la policía de Iguala cuando se manifestaban, y 20 resultaron heridas.
Desde entonces siguen desaparecidos 43 estudiantes capturados por los policías municipales y entregados al cartel de la droga Guerreros Unidos, que disputa la ruta en ese estado montañoso con costas en el Pacífico.
Un grupo de 28 cuerpos fue encontrado en fosas clandestinas cerca de Iguala. El Procurador federal, Jesús Murillo, informó el miércoles que las primeras pruebas forenses que en principio descartaron que esos restos fueran de estudiantes, podían ser "erróneas", porque las hicieron autoridades de Guerrero, y esperaba los análisis de un equipo de forenses argentinos que llego a pedido de los familiares.
Hasta esta fecha han sido detenidas 51 personas relacionadas con los crímenes, entre ellos policías municipales y al jefe de la banda delictiva Guerreros Unidos.
El alcalde de Iguala, su esposa y el jefe de la policía están prófugos y acusados de conexiones con esa mafia y de haber ordenado los ataques para que los estudiantes de magisterio rural no boicotearan un acto político de campaña.
