Luis Mazón, quien sería el nuevo alcalde sustituto de Iguala, la ciudad del estado de Guerrero en el sur de México donde 43 estudiantes fueron secuestrados por policías y narcotraficantes y desaparecidos hace más de un mes, asumió el cargo el miércoles y renunció en menos de 24 horas.
Mazón fue designado al cargo por el Cabildo Municipal y rindió protesta tras la destitución del alcalde prófugo, José Luis Abarca, quien está prófugo, acusado de estar vinculado con el crimen organizado y haber ordenado los ataques contra los estudiantes con saldo de seis muertos, 20 heridos y 43 desaparecidos.
“Me interesa Iguala (200km al suroeste). Vamos a hacer la lucha, pero resulta que me citan a las 10, y casi hasta las 2 de la tarde me toman protesta, porque no se ponían de acuerdo”, dijo en entrevista con la cadena mexicana de radio Imagen, de cobertura nacional.
“A punto estuve de abandonar todo, pero la prudencia y el apoyo de la gente me hizo controlarme. La prudencia pudo más en mí”, dijo el efímero alcalde para explicar su sorpresivo ascenso y su inmediata renuncia voluntaria.
El político esgrimió razones personales, sin dar detalles: “prefiero vivir tranquilo con la vida que he llevado. No voy a tener problemas con la gente. Prefiero la tranquilidad, vivir tranquilo, estar en familia. Hay muchos intereses”.
"Al ver cómo algunos buscan sus beneficios, prefiero seguir siendo el amigo sencillo que todos conocen y seguir mi vida en paz y tranquilidad, y por respeto a mi familia", dijo en un comunicado de renuncia.
Mazón es hermano de quien fue secretario de Salud de Guerrero, Lázaro Mazón, quien renunció el 16 de octubre, a pedido del Gobernador Ángel Aguirre por su presunta relación con el ex alcalde prófugo de Iguala, Abarca.
Días después, el propio Gobernador renunció para facilitar las investigaciones sobre los desaparecidos.
Aguirre y Abarca llegaron a sus cargos por el partido de la Revolución Democrática (PRD, centroizquierda), que ha pedido “perdón” por llevar a un narcotraficante a la alcaldía de Iguala.
El ascenso y caída del alcalde Mazón ocurrió el mismo día en que padres y madres de 43 estudiantes desaparecidos en el estado de Guerrero acordaban el miércoles con el presidente de México, Enrique Peña, la firma de diez puntos de acuerdo para seguir buscando a los jóvenes y evitar la impunidad sin importar a quien castigue la ley.
