Las diferencias que mantiene Irán con los mediadores del Grupo 5+1 sobre el programa nuclear iraní son más bien de "carácter técnico", comentó el jefe del Consejo de Rusia para Asuntos Internacionales, Andréi Kortunov.
Este lunes expira el plazo en el que Irán y el grupo de los seis mediadores internacionales (EEUU, Rusia, Reino Unido, Francia, China y Alemania) deben alcanzar un acuerdo integral sobre el programa de energía nuclear del país persa.
"Solo queda conciliar unas cuantas cuestiones de carácter técnico, se logrará si existe voluntad política y una disposición al compromiso", indicó Kortunov a esta agencia.
Dijo que la complejidad del proceso negociador radica en las limitaciones que tienen todas las partes.
El problema de los representantes estadounidenses es su respectiva situación política interna y los resultados de las elecciones legislativas en EEUU, donde los republicanos controlarán las dos cámaras del Congreso.
"Ellos desconfían de cualquier acuerdo con Teherán que, según consideran, podría reanudar sus proyectos militares en cualquier momento", apuntó.
La delegación iraní igualmente actúa con gran cautela en cuanto a las concesiones, lo que también se debe a la política interna.
"En Irán no todos apoyan los logros del equipo (del presidente Hasan Rohani) y allí tienen sus propias fuerzas conservadoras… El presidente no puede ir demasiado lejos y aceptar todas las condiciones", explicó.
A juicio del experto, existen tres posibles desarrollos de la situación en torno al acuerdo nuclear.
"El primero consiste en aplicar los últimos esfuerzos y avanzar hacia el acuerdo; el segundo, implica la fijación del progreso en un documento informal para extender así el tiempo de las negociaciones", comentó.
La tercera posibilidad del desarrollo, podría ser la "peor de todas" porque en ese escenario "no se alcanzaría ningún acuerdo, por lo que el trabajo se podría echar por tierra".
