El gobierno de México investiga un nuevo caso de secuestro masivo de decenas de estudiantes, denunciado por una madre bajo condición de anonimato a la televisión francesa, dijo el miércoles el secretario de Gobernación (Interior), Ángel Osorio.
"Se está investigando", dijo el encargado del gabinete político federal, con el fin de verificar la versión difundida por el canal de televisión France 24, con base en una denuncia de desaparición de 31 estudiantes de secundaria en el municipio de Cocula, estado de Guerrero.
En una grabación con el rostro de la testigo bajo reserva, el canal francés divulgó el testimonio de una mujer adulta, quien dijo que el 7 de julio su hija y otros 30 jóvenes fueron secuestrados y desaparecidos.
La denuncia es aún más perturbadora porque en el basurero de ese municipio de Cocula, vecino de Iguala (200 km al sur), habrían sido asesinados y calcinados 43 estudiantes de la escuela rural de maestros de Ayotiznapa, considerados como desaparecidos desde hace dos meses en esa ciudad gobernada por un alcalde de izquierdas, aliado de las pandillas de narcotraficantes, según las pesquisas federales.
"Desde que supe se está investigando, inclusive se ha ido a la propia escuela. Espero tener algunos elementos para darlos a conocer", dijo el secretario federal Osorio en entrevista con el grupo noticioso Imagen.
El secuestro colectivo habría ocurrido unos tres meses antes del ataque a estudiantes de magisterio rural del vecino Iguala, cometido el 26 de septiembre, del cual este miércoles se cumplieron dos meses, en medio de una ola de protestas callejeras y brotes de violencia.
Agentes investigadores acudieron a la escuela secundaria de Cocula y "el propio director escolar manifestó que no tiene ninguna ausencia de lo que ellos tienen en sus listas", dijo el número dos del gobierno federal, dado que en México no existe el cargo de Vicepresidente.
"Está investigando la Procuraduría de Justicia del estado de Guerrero para ver si tienen alguna denuncia o algún dato al respecto", abundó el secretario de Gobernación federal.
El alto cargo del gabinete del Presidente Enrique Peña pidió a los medios de comunicación "esperar para no errar", sobre esa versión.
El gobierno se comprometió a "dar a conocer si hay algún indicio, alguna denuncia o alguna investigación", al respecto.
Un defensor humanitario vinculado al caso de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, dijo a la agencia Sputnik bajo reserva de su identidad, que "el tema nos ha tomado por sorpresa; y puede estar vinculado con cientos de familiares que ya buscaban a sus desaparecidos antes de que estallara el caso de los estudiantes en Iguala".
La madre de uno de los desaparecidos, dijo bajo condición de anonimato a la corresponsal del canal francés que desde que ocurrió aquel secuestro en julio pasado no sabe nada de su hija.
La denuncia difundida indica que los estudiantes fueron secuestrados por sujetos con los rostros enmascarados, pero llegaron en un coche de la policía.
France 24 reportó que el silencio colectivo se debe en parte a "lo que parece ser otro caso de complicidad criminal entre las fuerzas policiacas locales y los cárteles de la droga que operan con impunidad en la región".
"Los secuestradores dijeron a los residentes de Cocula que los matarían si hablaban. Las familias aterrorizadas no reportaron el incidente a las autoridades o los medios de comunicación hasta ahora", dice la corresponsal del reporte en inglés del canal que transmite noticias sin interrupción en francés, inglés y árabe.
Altos funcionarios del gobierno de Cocula y de la policía de ese municipio han sido arrestados bajo sospecha de tener vínculos con el crimen organizado y de ser cómplices del crimen de los estudiantes de la escuela de maestros de Ayotzinapa, quienes fueron atacados a balazos en Iguala hace dos meses.
El ataque del 27 de septiembre fue ordenado por el ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, postulado por el izquierdista PRD, quien envío a policías y narcos confabulados a balacear a los estudiantes, en una agresión saldada con seis personas muertas y 43 jóvenes de origen indígena desaparecidos; pero se teme que hayan sido ejecutados.
El caso ha desatado protestas masivas en las que los manifestantes han atacado edificios del gobierno y de los partidos políticos de México, con bloqueos de autopistas, entre brotes de violencia que han derivado de disturbios y una docena de arrestos.
