El cumplimento de los acuerdos de Minsk sobre el arreglo en Ucrania es la principal condición para el alivio de las sanciones de la UE contra Rusia, declaró la embajadora de Polonia en Moscú, Katarzyna Pelczynska-Nalecz, en una entrevista con RIA Nóvosti.
"La UE se moverá hacia el alivio de las sanciones, como se ha indicado varias veces, si Rusia toma medidas dirigidas a solucionar el problema; hoy en día el cumplimiento de los protocolos de Minsk es primordial", dijo la diplomática.
La embajadora estimó que los acuerdos de Minsk son "un punto de partida muy bueno para resolver el conflicto de manera política" pero lamentó que varias cláusulas suyas no se cumplen.
Subrayó que el conflicto en Ucrania es internacional y "de ningún modo puede resolverse solo por Ucrania, para conseguirlo es necesario involucrar a otras partes".
A la vez, Pelczynska-Nalecz señaló que las sanciones contra Rusia "no producen una reacción positiva en nadie".
"Las sanciones son la última herramienta posible cuando el resto ya ha sido usado y se ha mostrado eficaz", subrayó al agregar que "la política ulterior sobre las restricciones dependerá de lo que suceda en Ucrania y de la medida en que Rusia viole los compromisos internacionales y el derecho internacional respecto a Ucrania".
La embajadora reconoció que las sanciones afectaron la cooperación entre Rusia y Polonia que se estuvo desarrollando rápidamente aunque indicó que la economía polaca en general sufrió menos que algunos empresarios en concreto.
"Lamentablemente, las sanciones afectan la cooperación aunque quedan varias posibilidades y la colaboración continúa en los marcos establecidos por las limitaciones", aseguró.
Las relaciones entre Moscú y Occidente empeoraron a raíz de la crisis en Ucrania y, en particular, tras la adhesión de Crimea a Rusia en marzo pasado.
La Unión Europea y EEUU pusieron en marcha varios paquetes de sanciones contra Moscú que afectan tanto a particulares y empresas concretas como a sectores enteros de la economía rusa.
En respuesta, Rusia embargó por un año algunas importaciones alimenticias de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.
Rusia ha reiterado varias veces que no es parte del conflicto en el sureste de Ucrania.
