La policía rusa detuvo en la provincia de Kírov, al noroeste de Moscú, a dos individuos que supuestamente planeaban atentar contra un almacén local de armas químicas, informó la delegación regional del Comité de Investigación de Rusia.
El portavoz del organismo, Grigori Zhitenev, precisó que los detenidos, de 21 y 19 años, llegaron a Kírov desde Moscú. En un principio, los jóvenes, seguidores del islamismo radical, pretendían tramitar los pasaportes, presuntamente para viajar a Siria con el objetivo de recibir adiestramiento para perpetrar ataques terroristas.
No obstante, posteriormente cambiaron de planes y decidieron atentar contra el almacén local de armamento químico, tras informarse sobre la importancia de esa instalación y valorar la posible repercusión que tendría el ataque, agregó el funcionario.
Según la investigación, los yihadistas planeaban detonar una bomba de 10 kilogramos de trilita. La policía halló componentes para fabricar el artefacto en el zulo que los presuntos terroristas tenían en el interior de una vivienda abandonada.
En los registros practicados también se incautó numeroso material extremista.
