El presidente ruso, Vladímir Putin, esbozó hoy el alcance de la amnistía que la Duma de Estado, o cámara baja del Parlamento ruso, planea decretar este mes con motivo del 20 aniversario de la Constitución.
“Podrá extenderse únicamente a las personas que no hayan cometido delitos de gravedad o acciones violentas contra representantes del poder, ante todo, agentes del orden”, señaló Putin al reunirse este miércoles con el Defensor del Pueblo ruso, Vladímir Lukín, y el jefe del Consejo de Derechos Humanos, Mijaíl Fedótov.
Agregó que la amnistía debe “realzar el humanismo del Estado pero en ningún caso conducir a la reincidencia”.
El presidente aprobó en líneas generales el proyecto elaborado por el Consejo e instó a retocarlo conjuntamente con la Duma, el organismo al que incumbe proclamar la amnistía en Rusia.
Defensores de derechos humanos consideran que a la amnistía podrán acogerse de 50.000 a 100.000 personas, de una población reclusa que Fedótov estima en 670.000.
Al margen de la amnistía, según él, quedarán los delitos de asociación criminal, atentado terrorista, secuestro de aeronave, sustracción de materiales nucleares, espionaje, alta traición, atentado contra estadistas o agentes de seguridad, usurpación del poder y subversión.
Mientras, la prensa rusa ya se pregunta si la amnistía se extenderá a los reos más famosos de Rusia como el exmagnate petrolero Mijaíl Jodorkovski o las integrantes de la banda Pussy Riot.
Preguntado sobre estas últimas, Fedótov dijo que “sí”, por tratarse de un crimen no violento.
El abogado de Jodorkovski, Vladímir Krasnov, también confía en la amnistía aunque cree necesario “estudiar el texto y las restricciones que se indican”.
A juzgar por lo que dijo Putin, no podrán beneficiarse de la amnistía los inculpados del 'caso Bolótnaya', una decena de personas que se enfrentan a cargos como incitación a los disturbios masivos o violencia contra agentes de la ley a raíz de los desórdenes que siguieron a una manifestación antigubernamental celebrada en Moscú.
