El Consejo de la Federación (Senado) de Rusia aprobó hoy una ley que facilita el trámite de la ciudadanía rusa para los solicitantes que dominan el idioma ruso y proceden ellos o sus antepasados de espacios históricos rusos.
Un extranjero o una persona sin ciudadanía deberán presentarse ante una comisión para confirmar su condición de rusoparlante. Como tal será reconocido aquel que domine la lengua rusa y la use a diario en casa y en el medio cultural.
Podrán someterse a esa prueba solo aquellos que viven o vivieron -ellos mismos o sus parientes en línea ascendiente (padres, abuelos, etc.)- en un territorio de la URSS o del Imperio Ruso que actualmente se encuentra dentro de las fronteras de la Federación Rusa.
Según la nueva ley, el solicitante deberá renunciar a la ciudadanía del Estado extranjero si la tiene.
Se simplifica la formalización de la entrada de tales personas en Rusia y la obtención del permiso de residencia con el fin de recibir posteriormente la ciudadanía.
El Consejo de la Federación aprobó también una ley que obliga a los migrantes laborales, excepto especialistas de alta cualificación, a confirmar de modo documentado el conocimiento del idioma ruso, así como de las bases de la Historia y de la Constitución de Rusia.