El proyecto del nuevo lanzador Angará está afrontando dificultades, declaró este jueves el presidente de la Corporación Espacial Unificada de Rusia, Ígor Komarov (ORKK).
"Los problemas no pasaron inadvertidos por la ORKK. Podríamos solicitar ayuda al Gobierno en el marco del programa de saneamiento financiero del centro espacial Jrúnichev", dijo Komarov a la prensa.
El viceprimer ministro Dmitri Rogozin, responsable del programa espacial ruso, expresó su esperanza de que el proyecto Angará se desarrolle con éxito.
"Espero que ya no tengamos contratiempos", apuntó.
El Angará es el primer cohete ecológico diseñado y construido en Rusia desde la desaparición de la Unión Soviética en 1991. Permitirá lanzar desde el territorio ruso satélites de todo tipo sin contaminar la atmósfera de la Tierra (los actuales lanzadores Protón usan como combustible un componente muy tóxico).
La serie Angará incluye lanzadores de clase ligera, mediana y pesada. Los nuevos cohetes están diseñados para las necesidades de defensa, así como para fines económicos y científicos.
Inicialmente el primer lanzamiento del Angará 1.2 PP de clase ligera estaba previsto para el 25 de junio, pero luego fue aplazado dos días. Sin embargo, el 27 de junio el lanzamiento se canceló de modo automático al detectarse un desperfecto técnico.
Según comentó la empresa Energomash, que diseñó el motor de la primera etapa del Angará, la cancelación se debió a la caída de presión en el tanque de oxidante.
El lanzamiento de un Angará de clase pesada está previsto para finales de 2014 desde Plesetsk (noroeste de Rusia). El vuelo tripulado de Angará está fijado para 2018 desde el nuevo cosmódromo Vostochni, en Lejano Oriente ruso.
