La reforma militar debe reforzar la capacidad combativa de las Fuerzas Armadas de Rusia

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La formación de nuevas regiones militares y comandos estratégicos unificados son los elementos más importantes de la reforma militar en Rusia.

La formación de nuevas regiones militares y comandos estratégicos unificados son los elementos más importantes de la reforma militar en Rusia.

Los nuevos cambios en la dislocación de las tropas fue uno de los temas principales abordados en una reunión celebrada por el Ministerio de Defensa ruso en la ciudad de San Petersburgo el pasado 23 de septiembre.

Los participantes prestaron atención especial a la formación de la primera región militar occidental que aglutina las antiguas regiones militares de Moscú y de San Petersburgo, además de las Flotas del Báltico y del Norte.
Y aunque los detalles de la citada discusión no se han hecho públicos, el tema de la nueva organización de las estructuras militares del país de nueva generación ha suscitado un gran interés.

Nuevas Regiones Militares: primera etapa

Según muchos analistas, la formación de nuevas regiones militares y comandos estratégicos unificados es el mayor éxito de la reforma militar. No hay nada sorprendente en eso. La necesidad de reformar el sistema de mando del Ejército ruso es algo que se ha venido planteando desde hace mucho. Ya en la época soviética, Moscú dio los primeros pasos para establecer unidades similares a las actuales.

La división administrativa militar de Rusia. Infografía 

Las mayores potencias occidentales mantienen la misma estructura del Ejército que permite a un estado mayor conjunto controlar simultáneamente todas las fuerzas a su disposición encauzando los esfuerzos hacia un objetivo común de forma rápida y operativa.

La nueva jerarquía de las unidades es como sigue: Comandos estratégicos unificado a la cabeza de Regiones Militares - mandos operativos que asumen el mando directo de las tropas en la zona de conflicto y corresponden a los antiguos Ejércitos - brigadas.
Aún es prematuro hablar sobre resultados de la reforma. Es necesario establecer las restantes tres Regiones Militares y Comandos estratégicos conjuntos. Además, llevará tiempo la formación de los oficiales de deben dirigir las unidades, coordinar las fuerzas, acumular y sistematizar la experiencia y sacar conclusiones teóricas.

Los ejercicios celebrados durante los próximos años demostrarán cómo funciona la nueva estructura y qué modificaciones son necesarias. La conclusión final sobre la eficacia del nuevo sistema de mando del Ejército ruso será posible hacer dentro de 10 ó 15 años, después de que la nueva generación de oficiales de carrera se acostumbre a trabajar en esta estructura. Esto será posible en caso de llevar a cabo la reforma sin drásticos cambios inesperados.

Recursos financieros

La eficacia del nuevo sistema de mando está vinculada con otros factores, incluídos recursos financieros que se destinan para la defensa.
En la antesala de la citada reunión, el presidente ruso, Dmitri Medvédev, aprobó el presupuesto del Programa federal de desarrollo de armamentos y material para 2011-2020 en el monto de 22,5 billones de rublos ($US726.000 millones), de los que más de 19 billones de rublos ($US613.000 millones) estarán destinados para las Fuerzas Armadas y los fondos restantes se distribuirán entre otros servicios de seguridad.

A principios del pasado verano se preveía destinar sólo 13 billones de rublos ($US419.300 millones) para el citado programa, lo que fue insuficiente, según el Ministerio de Defensa.
Sin embargo, según los analistas, el Ministerio de Defensa, en esencia, necesita unos 36 billones de rublos ($US1.16 billones) para satisfacer todos sus necesidades hasta 2020.
Los recursos se destinan para mantener la capacidad combativa de las Fuerzas Nucleares Estrategicas, renovar el armamento y material bélico de la Fuerza Aérea, tropas de defensa antiaérea y la Marina de Guerra.

El proceso de dotación de nuevo armamento y materiales para las tropas terrestres se relega al segundo plano. Las unidades blindadas y motorizadas deberán reparar y modernizar los vehículos anticuados. No obstante, se prevé dotar a las tropas terrestres con el nuevo equipo, incluidos sistemas modernos de mando y comunicación sin los que es imposible dirigir las unidades y coordinar las fuerzas de los nuevos Comandos estratégicos operativos.

La citada decisión parece apropiada, teniendo en cuenta los recursos limitados del país. Las actuales relaciones de Moscú con los vecinos más fuertes, es decir, la OTAN en el Occidente y China en el Oriente, reducen al mínimo la amenaza de una hipotética guerra terrestre entre Rusia y un poderoso enemigo dotado con los armamentos y material más modernos.

Por otro lado, los conflictos locales a lo largo de las fronteras sur de Rusia, especialmente, en la región de Asia Central son posibles. Un sistema moderno de mando de las tropas será mucho más eficaz que nuevos vehículos blindados para conseguir la victoria en tales conflictos armados con pérdidas mínimas.

¿Quién es responsable de la tragedia en Buinaksk, Daguestán?

Otro tema discutido por los participantes de la reunión en San Petersburgo fue la reacción de los altos mandos de las Fuerzas Armadas rusas al atentado suicida perpetrado el pasado 4 de septiembre que causó tres muertos y 35 heridos en un campamento adyacente a un polígono militar cerca de la ciudad de Buinaksk, en Daguestán.
Tras la reunión, el general Nikolai Makárov, jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, declaró que la tragedia sucedió como resultado de la actitud irresponsable y negligente de varios oficiales y que los responsables serán destituidos.

Aunque la dura reacción del Ministerio de Defensa es justificada, además de destituir a los responsables de la tragedia es necesario reforzar la seguridad, primeramente en las regiones del sur de Rusia, y cambiar la mentalidad de las tropas para impedir que las medidas aplicadas pasen a ser otra campaña militar a corto plazo. Esta tarea es mucho más difícil y su realización llevará más tiempo.

¿Quién cumplirá el servicio militar?

Una vez finalizada la reunión, el ministro ruso de Defensa, Anatoli Serdiukov, y defensores de derechos humanos discutieron otro asunto muy importante de la reforma militar y muy actual en Rusia durante los últimos años. Se trata del servicio militar obligatorio.
 
Según Serdiukov, hoy en día, es imposible aumentar el número de efectivos profesionales debido a la falta de recursos financieros. El Ministerio de Defensa planea continuar la paulatina transición del sistema de servicio militar obligatorio hacia un ejército profesional cuando la situación económica en Rusia mejore. Las Fuerzas Armadas siguen recibiendo el equipo sofisticado y necesitan el efectivo orgánico cualificado para manejarlo.

Hoy por hoy, la organización del servicio militar y formación de los reclutas llamados a las filas sólo durante 12 meses sigue siendo el problema más importante. Según varios expertos, las condiciones del servicio militar obligatorio se han mejorado demasiado en comparación con las que se registraron hace 10 ó 15 años.
 
Sin embargo, el problema del trato denigrante hacia los soldados jóvenes todavía no ha sido solucionado. Así las cosas, parece muy oportuna la propuesta del ministro de Defensa de acompañar a los reclutas del centro de reclutamiento a las unidades militares dirigida a los activistas de derechos humanos.
A pesar de los problemas que existen con el reclutamiento, el Ministerio de Defensa no tiene intenciones de extender la duración del servicio militar fijada en 12 meses, por factores políticos y sociales.

Un año del servicio obligatorio en combinación con programas de formación militar más intensas en la mayoría de las unidades hacen posible mantener la capacidad combativa de las tropas.
Según expertos, en caso de extender el período de la 'mili' hasta dos años el número de desviacionistas crecerá drásticamente.

La reforma militar en Rusia necesitará varios años hasta llegar a su fin. Es necesario finalizar el establecimiento de Regiones Militares y Comandos estratégicos conjuntos, mejorar el sistema de formación de oficiales y suboficiales de carrera y determinar el porcentaje de efectivos profesionales en el Ejército.

Es evidente que el Ministerio ruso de Defensa tiene la necesaria voluntad política y goza de apoyo del gobierno del país para continuar llevando a cabo la reforma militar. Esperemos los resultados.

LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI

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