Un grupo de legisladores iraníes ha redactado un proyecto de ley que obliga al Gobierno a enriquecer uranio al 60% en caso de que EEUU y otros países occidentales amplíen sus sanciones contra la República Islámica, informa hoy Nezavisimaya Gazeta.
La iniciativa legal surge después de que el Congreso de EEUU iniciara, pese a las objeciones de la Casa Blanca, el debate de un proyecto de ley para imponer nuevos castigos contra Teherán si este incumple el acuerdo alcanzado con el Grupo 5+1 (Rusia, EEUU, China, Reino Unido, Francia + Alemania) en la reunión en Ginebra el mes pasado.
“El proyecto de ley se elaboró en respuesta al gesto hostil de EEUU”, afirmó el diputado Sayed Mehdi Musavineyad, uno de los autores del documento. Según el legislador, su país necesitará uranio enriquecido al 60% para fabricar combustible de submarinos nucleares.
Por su parte, desde la Comisión parlamentaria para la Seguridad Nacional y Asuntos Exteriores aseveraron que el borrador se diseñó para dar ventaja a Irán en las negociaciones. “Permitirá seguir adelante con el programa nuclear si el acuerdo de Ginebra fracasa”, explicó un portavoz de la entidad.
El borrador, firmado por 100 de los 290 diputados de la Asamblea Consultiva Islámica (Majlis), fue presentado el pasado miércoles ante la Presidencia del Parlamento iraní, que podría tramitarlo en los próximos días por tratarse de un documento de “alta importancia”. Si recibe luz verde, el Gobierno iraní deberá preparar la puesta en marcha de los centros nucleares de Natanz y Fardu, ante posible aprobación de nuevas sanciones contra Teherán o una eventual violación de su derecho a un programa nuclear civil.
A primera vista, la propuesta legislativa podría provocar un nuevo conflicto directo entre la República Islámica y las potencias. Sin embargo, los diplomáticos y analistas sospechan que Irán quiere usar la ley como herramienta de presión en las negociaciones con el Grupo 5+1.
En opinión de Vladímir Evseev, director del Centro de Estudios Políticos y Sociales, las declaraciones iraníes sobre la necesidad de enriquecer uranio al 60% no son más que un intento de presionar sobre EEUU. “Irán no dispone actualmente de tecnologías para fabricar submarinos de 5.000 toneladas de desplazamiento con propulsores que consumen uranio enriquecido al 60%. En el mejor de los casos, podría construir sumergibles de hasta 500 toneladas de desplazamiento”, explicó el experto a Nezavisimaya Gazeta.
Según Evseev, tanto el Majlis iraní como el Congreso norteamericano intentan hacer fracasar el pacto de Ginebra. “Ambas partes hacen lo posible para impedir que el acuerdo entre en vigor ya en la primera fase”, resumió.
