Rusia perdió la licitación para construir una planta de fusiles Kalashnikov en Vietnam y próximamente los militares vietnamitas reemplazarán sus AK-47 que emplean desde el siglo pasado por los fusiles de asalto israelíes Galil ACE 31 y ACE 32, comenta hoy el diario ruso Kommersant.
Según este rotativo, que cita una fuente de la exportadora de armas rusa Rosoboronexport, tres países participaron en la licitación abierta el año pasado: Israel, Rusia y China. El ganador construirá una planta que deberá ensamblar hasta 50.000 fusiles automáticos anuales.
"El Ejército de Vietnam lleva tiempo empleando armas rusas (soviéticas). Los fusiles Kalashnikov de la serie 100 ofertados por Rusia serían lo mejor porque los soldados vietnamitas no tendrían que acostumbrarse a nuevo tipo de fusil automático. Pero el precio ahuyentó a los vietnamitas", dijo la fuente.
De acuerdo a Kommersant, el precio de la oferta rusa fue de unos 250 millones de dólares mientras que la de Israel, de 170 millones. En cuanto a China, su propuesta nunca interesó a Vietnam que aceptó la participación de ese país exclusivamente por motivos políticos.
El director general del consorcio Kalashnikov, Alexéi Krivoruchko, ha confirmado a Kommersant el revés sufrido por Rusia. "Hoy afrontamos elevados costes de producción, pero ya pronto realizaremos una optimización", señaló.
En todo caso, Vietnam es uno de los mayores compradores de armamento ruso y ocupa el quinto lugar en la lista de los clientes más importantes de Rosoboronexport.
Desde el punto de vista de indicadores numéricos, la pérdida de 250 millones de dólares no es ninguna tragedia: Vietnam sigue comprando anualmente a Rusia material bélico por unos 1.500 millones de dólares.
