El gobierno ruso remitió al parlamento un proyecto de ley para la ratificación del acuerdo sobre la regulación de la deuda de Corea del Norte a Rusia, escribe hoy el diario Kommersant.
Exactamente, se trata de la deuda contraída por Corea del Norte con la Unión Soviética, que como estipula el documento, equivale a 11.000 millones de dólares.
El acuerdo establece que de esa suma, Rusia condonará 10.000 millones, y los 1.000 millones de dólares restantes serán invertidos en proyectos de salud, educación y energía en el territorio norcoreano.
El diario destaca que el acuerdo entre Rusia y Corea del Norte, firmado en septiembre de 2012, fue un documento confidencial hasta octubre de 2013.
La deuda de Corea del Norte a la URSS comenzó a crecer debido a que Pyongyang suspendió los pagos a comienzos de 1990 a consecuencia de aguda situación económica del país asiático, y las negociaciones para arreglar el asunto duraron casi 20 años.
Al fin y al cabo, las partes acordaron que el monto de la deuda ascendió a 10.960.000 millones de dólares al que Rusia impuso un descuento del 90%.
La suma restante, 1.090 millones de dólares deberá ser amortizada en un plazo de 20 años en pagos iguales dos veces al año, pero según el acuerdo, ese dinero no llegará al erario ruso porque será destinado a financiar programas de desarrollo a cargo de empresas rusas en el territorio norcoreano.
Según el viceministro ruso de Finanzas, Serguéi Storchak, la regulación de la deuda norcoreana forma parte de la estrategia de Rusia de ayuda al desarrollo internacional.
Los expertos opinan que el objetivo principal del acuerdo es incluir a Corea del Norte en los proyectos internacionales que realizan las empresas y corporaciones rusas.
Hasta la fecha, el intercambio comercial entre Rusia y Corea del Norte ha sido muy modesto: 76 millones de dólares en 2012, lo que sitúa al país asiático en el 124 lugar entre los socios comerciales de Rusia.
En los últimos años, las inversiones rusas en Corea del Norte no superaban los 2.000 millones de dólares, aunque en 2013, el consorcio Ferrocarriles de Rusia terminó el proyecto más importante en el territorio norcoreano: la reconstrucción de la vía férrea Hasán-Razdin, que forma parte del proyecto para la construcción de un corredor de transporte que comunicará ambas Coreas con el ferrocarril transiberiano hasta el Pacífico.
Además, hay otros proyectos a realizar, como la exportación de energía eléctrica rusa a Corea del Sur a través de Corea del Norte, y la construcción de un gasoducto en el territorio norcoreano para trasegar gas ruso hasta Seúl.
