Después de fracasar en su intento de imponer rápidamente sanciones económicas a Rusia, EEUU decidió optar por su aislamiento político, escribe el diario ruso Kommersant.
La resolución que condena las acciones de Moscú en torno a Ucrania recibió un gran apoyo en la Asamblea General de la ONU mientras que en la OSCE, Rusia está lidiando contra los 56 otros miembros que insisten en que la misión de observadores al territorio ucraniano incluya Crimea que, para las autoridades rusas, ya forma parte de su país.
En la Asamblea General de la ONU el embajador ruso, Vitali Churkin, tras declinar las acusaciones de “anexión y robo” de Crimea, responsabilizó a EEUU y la UE de desatar la crisis en Ucrania y apoyar a los ultranacionalistas. A la vez, calificó de “justicia histórica” la incorporación de la península en Rusia.
Mientras, las embajadas estadounidenses ponen la etiqueta #RussiaIsolated (Rusia aislada) a todas sus informaciones sobre la Federación rusa. Lo mismo hacen otros diplomáticos occidentales.
Sin embargo, los expertos dudan que todas estas presiones consigan que Rusia corrija considerablemente su postura. Indican además que el aislamiento de Moscú podría afectar a propio EEUU que necesita el apoyo ruso en otras regiones del mundo, en particular en Irán.
