El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, llegó a China para elevar las relaciones bilaterales a un nuevo nivel, tal y como lo acordaron anteriormente los líderes de ambas potencias. En vista del acercamiento entre Washington y Pekín, Moscú se afianza como principal rival de EEUU en la arena mundial, escribe Kommersant.
Según el diario, Kerry está en China para implementar los acuerdos alcanzados el año pasado por el presidente Barack Obama y su homólogo chino Xi Jinping, que firmaron un documento sobre un “reinicio” de las relaciones.
Desde entonces, los lazos entre los dos países siguen una tendencia al alza, subraya Kommersant.
“Estados Unidos da la bienvenida al surgimiento de una China estable, pacífica y próspera”, dijo Obama en un comunicado difundido la víspera con motivo del inicio en Pekín de la sexta ronda del Diálogo Económico Estratégico bilateral entre ambos países.
Por su parte, el dirigente chino subrayó en el mismo evento que una “confrontación entre Pekín y Washington sería una catástrofe”. Al mismo tiempo, subrayó que ambos países deben “respetar la soberanía el uno del otro”.
Kommersant recuerda que el intercambio comercial entre China y EEUU alcanza actualmente la cifra astronómica de 500.000 millones de dólares.
La presente visita de Kerry a Pekín, según el rotativo, evidencia que el nuevo Gobierno chino ya no es percibido como un rival, mientras que ese papel, en vista de los últimos acontecimientos en el mundo, pasó a Moscú.
El “reinicio” ruso-estadounidense perdió fuelle, mientras que el que tienen ahora China y EEUU solo inicia su andadura, concluye Kommersant.
